Octubre Rosa: prevención, conciencia y esperanza frente al cáncer de mama

Cada octubre, el mundo se viste de rosa. Edificios, calles y personas se unen en una campaña que trasciende fronteras, el Mes Rosa, dedicado a la concientización sobre el cáncer de mama, la enfermedad más frecuente entre las mujeres y una de las principales causas de muerte por cáncer en el país.

En Paraguay, la lucha contra esta enfermedad sigue siendo un desafío. De acuerdo con el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS), el cáncer de mama representa una de las principales causas de mortalidad femenina, con más de 800 nuevos casos diagnosticados cada año y entre 400 y 450 muertes. Otras estimaciones, basadas en datos hospitalarios y registros regionales, elevan esa cifra a cerca de 1.700 a 1.800 nuevos diagnósticos anuales, lo que refleja tanto un incremento real de los casos como una mejora en la detección.

La Dra. Marina Ortega, jefa del Programa Nacional de Prevención, Detección Precoz y Tratamiento del Cáncer de Cuello Uterino y Mama (PNPCACUM), destaca que la prevención y la detección temprana son las principales herramientas para enfrentar la enfermedad. Según explica, una gran parte de los casos podría tratarse con éxito si se identificaran en estadios iniciales. “Nuestro objetivo es que las mujeres lleguen antes al sistema, que puedan hacerse los estudios sin trabas y que cada diagnóstico sea acompañado hasta el final del tratamiento”, afirma.

El impacto nacional: cifras que siguen preocupando

Durante los últimos años, las estadísticas del Instituto Nacional del Cáncer (INCAN) revelan que 10 mujeres mueren cada semana en Paraguay a causa del cáncer de mama. Solo en 2023, se confirmaron más de 600 nuevos casos y 274 fallecimientos. A nivel regional, el Departamento Central, Alto Paraná e Itapúa concentran la mayor cantidad de diagnósticos.

Aunque las cifras son altas, las autoridades sanitarias consideran que la mayor visibilidad de la enfermedad también es un reflejo del avance en la detección. En 2023, por ejemplo, se amplió la cobertura de estudios preventivos y desde entonces, las mujeres mayores de 40 años pueden realizarse una mamografía sin necesidad de presentar orden médica, medida que busca eliminar barreras administrativas y facilitar el acceso a la prueba.

La Dra. Ortega subraya que el problema no se limita a la falta de equipos, sino a su distribución desigual. “Contamos con más mamógrafos que antes, pero muchos siguen concentrados en las capitales. Nuestra meta es fortalecer las redes regionales para que ninguna mujer tenga que viajar cientos de kilómetros por un estudio”, detalla.

En departamentos como Alto Paraná, se han incorporado nuevos mamógrafos en hospitales regionales para acercar la tecnología a las comunidades más alejadas. Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer: Paraguay cuenta con cerca de 24 mamógrafos públicos para más de 800.000 mujeres en edad de estudio, una proporción muy por debajo del estándar recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Prevención: la clave para salvar vidas

El cáncer de mama puede detectarse precozmente mediante tres acciones, la autoexploración mamaria mensual, el examen clínico realizado por un profesional de salud, y la mamografía, que permite identificar lesiones incluso antes de que sean palpables.

La OMS sostiene que el 90 % de los casos detectados en etapas iniciales puede curarse con tratamiento adecuado. Sin embargo, en Paraguay, gran parte de las mujeres aún llega al sistema de salud en estadios avanzados, lo que reduce significativamente las probabilidades de supervivencia.

El PNPCACUM busca revertir esa tendencia con campañas sostenidas de educación y tamizaje. Durante el Mes Rosa, se intensifican las jornadas gratuitas de mamografías, ecografías y charlas comunitarias en hospitales, municipios y espacios públicos. También se promueven alianzas con gobiernos locales y organizaciones civiles para llevar unidades móviles a comunidades rurales y promover hábitos saludables que disminuyan el riesgo de desarrollar la enfermedad, como mantener un peso adecuado, evitar el tabaquismo y reducir el consumo de alcohol.

El cáncer de mama también afecta a los hombres

Aunque se asocia casi exclusivamente a las mujeres, el cáncer de mama también puede presentarse en hombres, aunque en menor proporción. La OMS estima que alrededor del 1 % de los casos globales corresponde a varones. En Paraguay, los reportes confirman su presencia esporádica, pero subdiagnosticada.

Los hombres suelen consultar más tarde, porque no relacionan los síntomas —como bultos, secreciones o cambios en el pezón— con una posible enfermedad oncológica. Esa demora provoca que la mayoría de los diagnósticos se realicen en etapas más avanzadas, lo que impacta negativamente en el tratamiento y la supervivencia.

Octubre Rosa: prevención, conciencia y esperanza frente al cáncer de mama

“Es fundamental que la población masculina también esté informada. El cáncer de mama no distingue género. Ante cualquier alteración en la zona del pecho, los hombres deben acudir al médico”, recalca la Dra. Ortega.

Avances, desafíos y compromiso

Si bien el país logró avances en infraestructura, sensibilización y cobertura, el desafío continúa siendo enorme. Aún existen brechas sociales y territoriales, falta de recursos humanos especializados, demoras en la atención y dificultades logísticas que afectan el acceso a diagnósticos y tratamientos oportunos.

Para la Dra. Ortega, la clave está en sostener las políticas públicas más allá de las campañas de octubre:

“El lazo rosa no debe ser solo un símbolo decorativo. Debe recordarnos que la detección temprana salva vidas. Necesitamos mantener el trabajo durante todo el año, con el mismo nivel de compromiso y acción”.

Dra. Marina Ortega


A nivel internacional, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) insiste en que hasta el 40 % de las muertes por cáncer de mama pueden evitarse con estrategias efectivas de detección precoz, tratamiento oportuno y educación permanente. En muchos países, la mortalidad ha disminuido gracias a los avances tecnológicos, terapias más efectivas y una mayor conciencia social.

Acompañar para sanar

El cáncer de mama no solo afecta al cuerpo. También impacta en la salud emocional, familiar y económica de quienes lo padecen. Por ello, los programas actuales en Paraguay buscan ofrecer atención integral, incluyendo acompañamiento psicológico, rehabilitación tras cirugías y asesoramiento genético para familiares con riesgo hereditario.

El apoyo comunitario, la empatía y la información clara son parte esencial del proceso. “Cada mujer diagnosticada necesita sentirse acompañada, comprendida y respetada. La detección temprana no termina con un examen, sino con un sistema que contenga, oriente y acompañe”, señalan desde el PNPCACUM.

Fonte: Paraguay.com