¿Por qué Paraguay decidió prohibir químicos en esmaltes y geles para uñas?

Desde este mes, Paraguay refuerza el control sobre la industria cosmética, prohibiendo el uso de dos sustancias ampliamente utilizadas en productos para uñas, el TPO (óxido de trimetilbencil difenilfosfina) y el DMTA (dimetiltioacetamida).

La medida, implementada por la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (Dinavisa), responde a crecientes evidencias sobre los posibles efectos dañinos que ambos compuestos tienen en la salud humana.

La disposición, en vigor desde el 1 de septiembre, establece que los cosméticos con estas sustancias ya no podrán renovar su registro sanitario y deberán salir progresivamente del mercado. Las empresas distribuidoras e importadoras recibirán notificaciones oficiales para adecuar sus inventarios y ajustarse a las nuevas exigencias.

Riesgos para la salud: lo que dicen los estudios

El TPO, común en los esmaltes semipermanentes y geles para uñas postizas, funciona como fotoiniciador, permite que el producto se endurezca al exponerse a lámparas de luz ultravioleta. El DMTA, en cambio, es un estabilizador plástico usado en distintas fórmulas cosméticas.

Ambos químicos están clasificados internacionalmente como tóxicos para la reproducción o potencialmente cancerígenos. En pruebas de laboratorio realizadas en animales, se observaron anomalías testiculares, reducción de fertilidad y alteraciones en el desarrollo.

Aunque especialistas en química cosmética señalan que la vía de exposición a través de las uñas es distinta a la ingestión, y por tanto el riesgo puede considerarse menor, los estudios fueron suficientes para que la Unión Europea decidiera su prohibición. Europa fue el primer bloque en vetar estos ingredientes, marcando un precedente que Paraguay ahora adopta.

Impacto directo en consumidores y trabajadores de salones

El uso de esmaltes en gel se popularizó en la última década por su durabilidad, acabado brillante y secado rápido. Sin embargo, expertos como David Andrews, del grupo ambientalista Environmental Working Group, advierten que la exposición repetida a TPO y DMTA afecta con mayor intensidad a trabajadores de salones de belleza, quienes manipulan los productos con frecuencia y pasan varias horas expuestos a la luz UV necesaria para fijar los esmaltes.

En consumidores, el riesgo es menor, pero no inexistente. Kelly Dobos, química cosmética de la Universidad de Cincinnati, sostiene que aunque la toxicidad observada en animales no debe generar pánico inmediato en quienes se hacen manicuras en gel, existen alternativas seguras que las marcas ya comenzaron a utilizar.

Consecuencias para la industria cosmética

La disposición no implica la prohibición de toda la categoría de esmaltes en gel, sino de aquellos que contengan TPO o DMTA. Empresas fabricantes e importadoras deberán reformular sus productos o apostar por alternativas ya aprobadas en otros mercados.

En la práctica, esto significa un desafío logístico y económico:

• Salones de belleza deberán revisar el origen de sus insumos y optar por líneas certificadas.

• Consumidores tendrán que informarse más sobre los productos aplicados en sus uñas.

• Importadores tendrán un plazo de adaptación para agotar inventarios y migrar hacia marcas que cumplan con la normativa.

El Nail Manufacturer Council on Safety, asociación vinculada a la industria, aclaró que esta regulación no debe confundirse con una “prohibición del esmalte en gel”, sino que se trata de una restricción a ciertos ingredientes. “Los esmaltes en gel continúan disponibles, siempre que estén formulados con componentes alternativos”, precisaron.

Paraguay en línea con estándares globales

La decisión coloca al país en sintonía con estándares internacionales de seguridad cosmética. Mientras la Unión Europea ya retiró del mercado los productos con TPO y se espera que el Reino Unido adopte medidas similares en breve, en Estados Unidos estas sustancias siguen presentes en diversos cosméticos.

Con esta resolución, Paraguay busca proteger la salud pública, evitar la importación de productos con compuestos dañinos y garantizar que los consumidores accedan a insumos más seguros.

El esmalte tradicional: una alternativa segura

Lejos de desaparecer, el esmalte clásico sigue siendo una opción vigente. Con más de 100 años en el mercado, su historial de seguridad es reconocido por expertos y continúa como alternativa frente a la moda de los geles semipermanentes.

“Yo misma prefiero los esmaltes tradicionales”, expresó Dobos, quien destacó que la innovación de la industria ya permite acceder a fórmulas libres de TPO y con acabados similares a los geles.

Una medida preventiva que apunta al futuro

La resolución de Dinavisa no solo es un acto regulatorio, sino un mensaje preventivo, la belleza no puede estar por encima de la salud. Al limitar el uso de compuestos cuestionados, Paraguay se adelanta a problemas futuros y fomenta un mercado más responsable.

“El control sanitario en cosméticos debe ser tan riguroso como en medicamentos, porque se trata de productos que usamos a diario en contacto con nuestro cuerpo”, coincidieron fuentes médicas consultadas

Fonte: Paraguay.com